Han pasado casi ocho años de la muerte de Yasir Arafat en un hospital militar al sur de París. Los médicos que le atendieron hasta el último suspiro hablaron de una “hemorragia cerebral masiva”, aunque sin concretar qué fue lo que la provocó.
A principios de Julio, el canal Al Yazira reveló que el Instituto de Radiofísica de Lausana había analizado restos biológicos de Arafat extraídos de la ropa del palestino entregada por el hospital a su viuda. En ellos había descubierto “una cantidad anormal de polonio”.
El pasado 29 de agosto se abrió una investigación para aclarar si el líder palestino murió envenenado. El tiempo apremia ya que la permanencia del Plonio disminuye en ciclos de cada 138 días de media. Y ya han pasado 1.384 días de su muerte.
Cuando hicimos la figura del Rais, el Museo tuvo que hacer un esfuerzo importante para poder llegar a Arafat. Finalmente y tras arduas gestiones se le pudo presentar su busto en barro en el hotel Ritz de Madrid. Fue necesario pasar innumerables controles de seguridad, incluido el propio busto.